El derbi extremeño se marcha hasta Villanueva de la Serena en un partido en el que la efectividad serona marcó el resultado
Penúltimo derbi extremeño de la temporada. El Badajoz con necesidad de abrir distancias con los puestos de descenso recibía en el estadio Nuevo Vivero a una Cruz Villanovense con la salvación asegurada y marcándose una de las mejores temporadas de su historia. En un escenario atípico pero apetecible, el que salió victorioso, y de qué manera, fue el conjunto serón ante un Juvenil que no supo contrarrestar las ocasiones. Y es que la efectividad fue lo que desniveló el encuentro ya que nada más empezar, a los cuatro de partido, Justi adelantó al conjunto de Villanueva con un tanto en el segundo palo tras una gran jugada por parte izquierda. El partido comenzó con un ida y vuelta que con el paso de los minutos podría reducir las ocasiones por la falta de costumbre en la superficie y por las medidas. En uno de esos intercambios, y con una alta presión por parte pacense, Georges tendría la primera con un disparo que se marchaba desviado y después sería Iñaki el que, tras un robo al borde del área en la salida serona, estrellaba el balón en el poste que le privaba de la igualada en el marcador. Sin embargo, Justi seguía a lo suyo y llevaba el peligro a la portería pacense. El jugador del conjunto serón se convertiría en protagonista ya que todas las acciones de peligro de su equipo llegaron por sus piernas, incluido el segundo tanto del partido al filo de la media hora tras recibir un envío en profundidad y ganar línea de fondo para ponerla atrás para que Junior, a placer, hiciese el segundo del encuentro. Y volvería a ser protagonista en el tercero. Nuevamente recibiendo al espacio y tras un caño a su marca, se plantaba dentro del área y era derribado para que Tapia no titubease con el lanzamiento desde los once metros para batir a un Alonso que nada pudo hacer en los tres tantos. El Juvenil lo intentaba con más corazón que cabeza, pero no conseguía crear excesivo peligro a la portería de Dani Parejo salvo contadas ocasiones.
Ya en la segunda mitad, el Juvenil comenzó a buscar acortar distancias en el marcador. Pablo Guerrero, Iñaki, Loreto y Georges tuvieron sus ocasiones, pero se encontraron con la respuesta del Dani Parejo que terminó cuajando un gran encuentro y dejando su portería sin recibir ningún tanto a pesar del empuje pacense. Los que si seguirían llegando serían los goles serones. Primero sería Moi el que se aprovecharía de un mal lanzamiento atrás de una falta que lo dejaba solo ante Alonso para batirlo con tranquilidad por bajo y Antonio cerraría la manita tras aprovecharse del rechace de Alonso a un libre directo de Tapia.
Con el resultado resuelto, la Cruz Villanovense sigue maravillando este año en la competición y deja al Juvenil en la lucha por evitar el descenso a final de temporada.